¿Ustedes sabían que manejaban de bolsillo el SENA? Sí, así como lo leen. Durante semanas, el Partido Verde en cabeza de Carlos Parra y el Profe Ferley Sierra tuvo el control total de una de las instituciones más importantes del país. Y al frente estaba nada más y nada menos que Luz Danna, esposa de Carlos Ramón González, un hombre que hoy está siendo investigado por la Fiscalía por movimientos financieros sospechosos que huelen —y muy mal— a corrupción.
No se trataba de liderazgo técnico ni de meritocracia. Se trataba de puro poder político. Mientras miles de jóvenes buscaban oportunidades de formación, los hilos del SENA eran manipulados desde la sombra por el clan del Partido Verde. ¿Cómo se explica entonces la ineficiencia, el abandono y la ausencia de respuestas reales por parte de la entidad?
El descaro fue total. Mientras en público hablaban de ética, en privado manejaban de bolsillo el SENA como si se tratara de una finca familiar. Recursos, nombramientos, contratos… todo pasaba por el filtro de una élite política que sigue creyendo que Colombia es su botín personal.

Y ahora vienen a hablar de “soluciones”, cuando lo único que hicieron fue llenar la entidad de cuotas políticas y amiguismos. Luz Danna, con el respaldo de su esposo investigado, convirtió al SENA en una extensión más de su poder familiar y partidista. ¡Esto no puede quedar en silencio!
La Fiscalía ya tiene los ojos puestos sobre los González, pero el país necesita más que investigaciones: necesita respuestas, necesita justicia. Porque mientras ellos se enriquecían, miles de colombianos quedaban sin formación ni oportunidades.

Y lo más indignante es la hipocresía. El Partido Verde, que se ha vendido como la renovación política, resultó peor que los tradicionales. Porque no solo han fallado en la gestión, sino que lo han hecho con aires de superioridad moral. Pero el pueblo ya despertó.
Recordémoslo bien: manejaban de bolsillo el SENA. Y hoy lo sabemos. La pregunta es: ¿hasta cuándo permitiremos que los mismos de siempre destruyan lo poco que aún funciona? En La Calle Nos Vemos